5 pasos para instalar su acuario

Se habla de equipamiento, decoraciones, arena, filtro, pero ¿cuál es la realidad? ¿Deberíamos tomar el mismo equipamiento que los demás o adaptarlo a su acuario ? ¿Necesitamos agua dulce o agua de mar?
Son preguntas normales que uno se hace para ofrecer a los futuros peces bienestar y comodidad, al igual que un funcionamiento óptimo para el acuario, independientemente del tamaño.
Para no cometer errores en la elección y la instalación del primer acuario, aquí hay algunos consejos que pueden proporcionar una primera visión de lo que se debe o no se debe hacer.

1/ Elegir la población 

Para un primer acuario, es muy importante escoger especies fáciles de mantener y que puedan adaptarse a los parámetros de agua que el usuario haya elegido.
Aunque la emoción esté presente al principio, no hay que comprar demasiados peces porque el acuario debe estar equilibrado, tanto por el número de sus habitantes como por la flora en conjunto. Se recomienda empezar con detritívoros como gambas, cangrejos ermitaños, erizos, caracoles.
Después, se eligen los peces, pero también es necesario esperar dos semanas entre la introducción de especies en el agua, pues el equilibrio es frágil. Se debe elegir en primer lugar los peces más frágiles porque no podrán "imponerse" en caso contrario frente a peces más imponentes.

 

2/ Los equipos básicos

Un acuario no es nada sin su equipamiento para que todo el conjunto funcione de maravilla, que el agua esté siempre clara y límpida e ideal para los peces, para que estos estén siempre en forma y puedan alimentarse o reproducirse normalmente juntos.

Entre todo este equipamiento, el primero a considerar tal vez sea el filtro: se presenta en diferentes formas (ventosas, caja de decantación, filtro exterior, etc.). La filtración juega un papel esencial en un acuario ya que, por un lado, filtra las impurezas y por otro lado, juega un papel biológico al garantizar un equilibrio perfecto del biotopo dentro del acuario gracias a las bacterias útiles en la degradación de las materias orgánicas liberadas por los peces y los desechos de plantas. El filtro oxigenará el agua continuamente.

Luego viene todo lo relacionado con la iluminación; es imperativo no exponer el acuario a luz solar directa porque este exceso de luz acelerará la proliferación de algas.
Por eso se preferirá un lugar sombreado.
Con la iluminación (un sistema funcionando unas 10 horas aproximadamente), es posible reproducir un ciclo día/noche para los peces. Las plantas, también, podrán beneficiarse de este aporte de luz para su crecimiento. Se considera que una buena iluminación es de 1 Vatio por 2,5 litros de agua. 

Igualmente, para la calefacción, hay que contar 1 Vatio por litro de agua. Se recomienda encarecidamente optar por un termocalentador porque su uso es muy simple. La potencia de la calefacción depende de la especie de peces pero también de la temperatura ambiente del lugar donde se encuentra el acuario.

 

3/ La arena y la decoración del acuario

De hecho todo depende del tipo de acuario: incluso si está allí como elemento decorativo y para estabilizar el conjunto, se debe intentar crear una ligera pendiente descendente hacia el frente del acuario para crear relieve. La arena es más elegida que la grava pues a menudo contiene una mezcla de turba y arcilla que serán útiles para las futuras plantas, para la colocación de algunas piedras. Existe también arena de coral, para acuarios de agua salada que ayuda a mantener el Ph del agua de manera constante y además, es más estética que otros tipos de arena. Lo importante, sea cual sea la elección, es depositar la arena o la grava después de haber colocado las piedras y las plantas, lo ideal siendo que estos últimos elementos reposen directamente sobre el vidrio del tanque, si no algunos peces (sobre todo los invertebrados) van a cavar en la arena y podrían provocar un pequeño desmoronamiento del conjunto.

Algunas plantas deben estar presentes dentro del acuario pero deben ser seleccionadas entre las especies más fáciles de mantener, que no requieran una iluminación intensa ni adición de sustrato nutritivo.

La decoración también forma parte de los ingredientes a instaurar en el acuario (sin contar que esta decoración puede camuflar los eventuales hilos y otros cables): piedras vivas, plantas artificiales, plantas vivas (con especies vegetales robustas).

 

4/ El montaje en sí

Hay que colocar sobre el mueble que va a sostener el acuario una delgada placa de poliestireno (1 cm de grosor) del mismo tamaño que el vidrio del fondo del tanque para evitar que este se rompa, principalmente a causa del peso del acuario.

Luego, se instala el equipamiento: se instalarán los diferentes filtros, el sistema de calefacción, quizás una bomba de agua y finalmente se pasará a la decoración (piedras, raíces) antes de colocar la arena que va a estabilizar el conjunto. 
Después de instalar estos primeros elementos, se va a llenar el tanque y añadir la plantación: se pone un tazón o papel periódico en el fondo del tanque sobre el que se va a verter el primer contenido de agua y cuando se alcance cierta altura (generalmente 20 cm), se añade entonces la vegetación. De vez en cuando, hay que tomar distancia para ver el conjunto y corregir los pequeños defectos de arreglo de la decoración, mientras se continúa llenando el tanque. Finalmente, después de haber terminado de llenar el tanque, se fija la iluminación y el resto del equipamiento si es necesario. Se deben introducir los peces solo 2 a 3 semanas después de haber instalado el acuario para que se establezca un cierto "rodaje biológico" y que todo esté perfecto para recibir a los futuros habitantes.

 

5/ La introducción de los primeros peces

Es fundamental apagar la iluminación para no estresar a los peces, dejar flotar la bolsa de plástico aproximadamente 15 minutos para que la temperatura de la bolsa sea idéntica a la del acuario y luego añadir poco a poco agua del acuario en la bolsa para evitar cualquier choque térmico. Después de 20 minutos, se pueden soltar los peces en el acuario y encender la luz solo al día siguiente para que los peces se hayan acostumbrado a su nuevo entorno. Para ser técnico, aquí están las especies recomendadas para un primer acuario: guppys, peces dorados, platys porque se reproducen con facilidad. Otros peces como los danios, los carácidos también pueden ser adecuados.




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