Comportamiento del gato: ¿Cómo detectar los trastornos?

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Las razones
Los síntomas de estos trastornos
¿Cómo calmar a su gato?
La feromonoterapia

No hay que preocuparse pero todo esto parecen ser síntomas de uno o varios trastornos en el gato. Estos suelen estar relacionados con el aburrimiento o el estrés.
Es muy importante prestar atención especial para ofrecer al gato un ambiente estimulante, tranquilizador y confortable. Con la ayuda de un veterinario y tratando de comprender a su gato, es posible superar estos trastornos que causan muchos daños materiales y que hacen infelices tanto al gato como a su dueño.

Las razones

Es esencial tratar lo más rápido posible los trastornos de comportamiento en el gato en cuanto se detectan: castigar a su animal no sirve de mucho, especialmente después del hecho. Para él, todos estos problemas no son más que la manifestación de una molestia, un deseo de apropiación de los lugares, una incomodidad debido a un cambio de ambiente. Pero todo esto se educa.

Existen diversas razones para estos trastornos como:

. razones relacionadas con el ambiente:

si el gato comienza a orinar al lado de su arenero, hay una razón, simplemente está tratando de marcar su territorio. Contrariamente a lo que se cree, no está tratando de "ser más astuto" con su dueño, está indicando por este gesto extraordinario para él dónde está su territorio o que algo anda mal como un arenero demasiado cercano a su comida, un arenero demasiado sucio, un arenero dejado en un lugar abierto o expuesto a corrientes de aire. Al gato le gusta su intimidad, necesita un lugar delimitado y respetado.

Del mismo modo, si se mueve un mueble, si se cambian las pinturas de una habitación, si se agregan nuevos objetos, nuevos olores se instalarán y lo perturbarán. El gato es un animal lleno de hábitos y los valora mucho.

. razones psicológicas:

son razones que no siempre se ven a primera vista. De hecho, estas razones no son más ni menos que estrés: el gato percibe cualquier cambio en sus hábitos, ya sea en el ambiente físico o en el ambiente familiar. Esto puede perturbarlo y entonces expresa su malestar a su manera. Normalmente, todo se traduce simplemente por un pequeño charco de orina que tiene como objetivo marcar de nuevo su territorio. Lo importante (según el gato) es dejar una marca en el ambiente para afirmar su presencia y su identidad. Este tipo de comportamiento se observa a menudo cuando llega un nuevo animal al hogar y viene a "competir" con el gato, cuando los invitados son demasiado ruidosos y molestan a "el señor", cuando ocurre una tragedia en una familia como un fallecimiento y la atmósfera cambia. Cualquier modificación en su rutina será notada por el gato y le estresará.

Otras fuentes de estrés están presentes en el gato que le provocan trastornos de comportamiento. Se puede mencionar, en ¾ de los casos, una falta cierta de actividad pero la convivencia con otros animales tampoco ayuda siempre y a menudo se pueden observar pequeños "piques" entre el gato y sus nuevos "compañeros".

Un gato, de naturaleza ansiosa (los hay), puede ver su estrés aumentar cuando sabe que otro gato ronda en los alrededores, no se siente entonces a gusto y quiere defender su territorio, su instinto cazador lo pone en alerta constante y lo perturba en su rutina. Del mismo modo, ciertas enfermedades (trastorno hormonal, inmunitario, neurológico) pueden influir en su comportamiento. Como última instancia, también se nota que los castigos incrementan su estrés.

Los síntomas de estos trastornos

El gato expresa su estrés y molestia de diferentes maneras, las cuales pueden descifrarse rápidamente para gestionarlas mejor.
Se nota primero la agresividad: algunos gatos tienen "crisis de agresividad" sin razón aparente y entonces comienzan a saltar sobre todo lo que se mueve, en particular sobre su dueño. Atacan las pantorrillas. El gato indica por ahí que quiere jugar con la persona en cuestión y que necesita que se ocupen de él.
Pero esta agresividad también puede tener causas con respecto a su alimentación: puede ocurrir que el acceso a su comida no sea tan sencillo y esto le limite o el gato entre en competición con otros animales por su comida.

En el mismo sentido, hay que saber que un gato debe consumir al menos 1/3 de su porción en proteínas porque es ante todo un carnívoro: la calidad de estas proteínas debe ser vigilada porque una alimentación de baja o mediocre calidad puede llevar a una carencia de proteínas y por lo tanto provocar trastornos en su comportamiento porque el gato sentirá estas deficiencias.

Lo importante es ofrecerle una alimentación sana, fresca y si es posible poder fraccionarla a lo largo del día. Su agresividad también puede provenir de un problema con su salud: en caso de duda, el gato debe ser desparasitado regularmente ya que los parásitos perturban la digestión del gato y lo incomodan. No hay que dudar en consultar a un veterinario en esta situación para asegurarse.

Otro síntoma es la orina fuera de la caja: esta situación particularmente desagradable indica dos posibilidades, es decir, el gato quiere hacer sus necesidades fuera del arenero porque no le conviene (limpieza, ubicación, contenido del arenero), o el animal quiere marcar su territorio. Es necesario determinar el origen de este comportamiento: concretamente, si el gato orina sobre superficies horizontales, quiere hacer sus necesidades en otro lugar que no sea el arenero (adopta la misma posición que cuando está en él). Entonces el gato puede sufrir problemas urinarios y es necesario consultar a un veterinario o el arenero no es adecuado por las razones mencionadas anteriormente. Pero si el gato orina sobre superficies verticales como un mueble, una pared que puede llegar hasta 20 centímetros de altura, entonces quiere marcar su territorio (poniéndose de pie y orinando lo más lejos posible).

La lucha territorial con otro gato también es un síntoma de estos trastornos de comportamiento: de hecho, al incorporar un nuevo gato en su entorno habitual, el gato reaccionará ya que esto lo obligará a compartir también su comida, su hogar, su arenero, sus zonas de descanso. Esta situación lo estresará al máximo, hay que reaccionar lo más rápido posible antes de que uno domine al otro prohibiéndole todo acceso a sus necesidades o si uno de ellos muestra agresividad hacia el otro.

Otra fuente es el problema durante los viajes en coche: es una situación incómoda para el gato que lo estresará: está encerrado en una jaula, levantado bruscamente del suelo, colocado en un ambiente ruidoso y del cual no domina los olores: en cualquier caso, el gato puede maullar, agitarse, temblar, hipersalivar pero también tener náuseas o incluso vomitar.

Numerosos otros síntomas pueden notarse cuando un gato vive trastornos de comportamiento: hay una forma de autodefensa que se crea, por ejemplo, donde el gato se defiende contra cualquier acercamiento o porque no le gusta ser manipulado. Las caricias y el manejo del gato se aprenden, hay que acostumbrar al gato a esto progresivamente.
Otra fuente de un trastorno puede ser una especie de estado de confusión donde el gato pierde sus referencias porque se ha despertado bruscamente o porque la habitación donde se encuentra contiene sustancias que le irritan (drogas, cigarrillos, incienso). Incluso puede ocurrir que el gato presente trastornos como los humanos, a saber, la esquizofrenia.

¿Cómo calmar a su gato?

Lo más importante es comprometerse a mejorar el entorno del gato respondiendo a sus diversas necesidades: espacio, alimentación, juego, estimulación, predación, etc.

Es muy importante que el gato se sienta confiado y seguro: el gato vive en un mundo que debe proveerle de lugares para trepar, mostrar, esconderse y ocultarse de otros si es necesario. Es por eso que a menudo se recomienda la compra de un árbol para gatos para satisfacer todas estas necesidades. También se pueden añadir elementos para que se esconda y "juegue" a no ser visto como macetas grandes, estantes bajos, cajas de cartón.

En cuanto a la sociabilidad, el gato es un animal individual y su grado de tolerancia hacia otros gatos o incluso humanos varía según el gato: por lo tanto, hay que respetar su necesidad de independencia y la soledad que necesita en momentos a través de un lugar que le sea dedicado únicamente, un lugar donde pueda moverse a voluntad hacia su arenero, su alimento, beber agua.
El gato es un animal que necesita mucha estimulación sensorial, ya sean olfativas, sensoriales, visuales: así es como al gato le gusta posarse para admirar su entorno y reaccionar en función y si es posible sobre una superficie para rascar para que haga sus garras (los árboles para gatos con varios niveles ofrecen este tipo de posibilidades). Del mismo modo para la alimentación, es bueno poder variar la textura de su alimentación.
Le gusta jugar por encima de todo porque esto despierta su instinto de cazador perfectamente conservado: los juguetes que hacen ruido, que vibran, que rebotan tienen toda su preferencia. Cabe destacar que al gato le gusta mucho jugar con un humano en lugar de hacerlo solo.

La feromonoterapia

Es una nueva tecnología que tiene como objetivo resolver los problemas de comportamiento, especialmente en gatos. Se basa en las feromonas emitidas por los animales en diversas ocasiones.
En el gato, existen 3 tipos de feromonas, a saber, las que sirven para marcar su territorio (que se encuentran en la orina), las que sirven como sistema de alarma y de distanciamiento (localizadas en las almohadillas y en las glándulas anales) y finalmente las feromonas de calma y familiarización que se encuentran cuando el gato se frota contra su dueño o un mueble o cuando dos gatos se lamen mutuamente).
Estas sustancias químicas naturales sirven para comunicarse mejor y comprender el entorno. Y si cambia una feromona, un olor, potencialmente también puede cambiar el comportamiento del gato. Gracias a la feromonoterapia, ahora es posible contrarrestar y superar los trastornos de comportamiento del gato, contrarrestar su agresividad, evitar arañazos en los muebles y mobiliario, eliminar cualquier conflicto entre el gato y sus congéneres.

Esta tecnología de la feromonoterapia es creada por la marca Feliway y se presenta en dos soluciones, ya sea en spray o en difusor.
Para el spray, debe utilizarse en casos donde hay rastros de orina pero también en caso de arañazos o en la jaula de transporte y también sobre objetos salientes de una habitación (esquina de pared, mueble esquinero). Es necesario rociar bien el spray sin mojar la zona afectada de lo contrario la eficacia se perderá y el gato simplemente creerá que otro gato ya ha marcado su territorio. Entonces volvería para refrescar esa huella.
Para el difusor, se utiliza principalmente en un hábitat que alberga varios gatos, en caso de mudanza o durante obras, cambios de muebles. El difusor se usa como un difusor anti-mosquitos y se enchufa 24/7 a un tomacorriente eléctrico.
El difusor cubre una superficie de aproximadamente 70m² y su efectividad está comprobada durante 4 semanas.

feliway

Es la marca Feliway la que propone esta nueva tecnología, una solución simple y efectiva para luchar contra los comportamientos indeseables de su gato. Gracias a esta técnica de reproducir las propiedades calmantes de ciertas feromonas, el gato se sentirá de nuevo seguro, ya no habrá estrés en el orden del día.
La ventaja de esta tecnología es que se puede usar en zonas específicas.

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