Gato Siamés: ¡Todo lo que necesitas saber sobre él!
Al igual que el Persa, el gato Siamés es una de las razas de gatos domesticados muy antiguas. Este gato seductor de ojos azules en forma de almendra, un poco hablador, brilla por su inteligencia y siente un amor incondicional por su dueño. Descubre todo lo que constituye su identidad.
La historia del Gato Siamés
El origen del gato Siamés se remonta al siglo XIV, en Asia, en el reino de Ayutthaya en Siam. Su antecesor, el Wichienmaat, muy apreciado en Tailandia, también se llama "gato tailandés". Largo tiempo reservado únicamente para la familia real, se consideraba al gato Siamés como un animal sagrado. Podía pasearse libremente por todo el palacio y a veces funcionaba como guardián de los templos.
En Occidente, hizo su primera aparición en 1884, durante la Gran Exposición del Palacio de Cristal de Londres, y en París, un año más tarde. A partir de 1890, estos gatos fascinantes son exportados a Estados Unidos. La raza obtiene su reconocimiento oficial en 1936, en Gran Bretaña, cuando se fundó el Siamese Cat Club.
Debido a los muchos cruces en los que ha participado el gato Siamés, más de 15 razas de gatos domésticos provienen de él. Las más conocidas son el Himalayo, el Havana, el Tonkinés, el Oriental de pelo corto, el Balinés y el Mandarín.
La apariencia física del Gato Siamés
Podríamos sorprendernos al aprender que inicialmente, el cuerpo del gato Siamés era bastante robusto y tenía una cabeza más redonda. Es a partir de los años 60, más específicamente, que algunos criadores americanos cruzaron esta raza con otros gatos de origen oriental para obtener la apariencia que lo caracteriza hoy en día: silueta alargada, flexible y atlética, patas delicadas, rostro triangular con el hocico puntiagudo, grandes orejas y ojos azules (siempre en forma de almendra pero más abiertos).
El pelaje fino y brillante puede presentar una veintena de tonalidades diferentes (crema, beige-gris, gris-lila, beige tirando a marrón...). Las patas, la cola y las orejas suelen ser de color más oscuro, creando un contraste estético (por ejemplo, en el Seal Point).
Los gatitos siameses nacen todos con un pelaje blanco debido a su gen albinismo. Su color definitivo se desarrolla alrededor del año de edad y se oscurece con la edad. En promedio, el tamaño de un gato Siamés adulto es de 30 cm (a la altura de la cruz). El peso de un macho adulto está entre 3,6 y 6 kilos, y alrededor de 3-4 kilos para una hembra.
Hoy día, existen cuatro tipos principales de Siamés: Inglés, Tailandés, Americano y Apple Head. El más común es el Siamés Inglés.
El carácter del Gato Siamés
El apego a su dueño constituye uno de los rasgos principales en el carácter del gato Siamés. Incluso tiende a querer acompañarlo en todas sus actividades diarias y a "conversar" con él.
El maullido de esta raza de gato es particular, más agudo que el de otros gatos domésticos, puede incluso volverse estridente cuando el animal está molesto. No soporta bien la soledad y se aburre fácilmente. A veces es de humor cambiante y puede llegar a ser caprichoso. Si tiene la impresión de que su dueño está en peligro, el Siamés puede atacar lo que percibe como una amenaza.
Criado con uno o más animales domésticos desde joven, este gato acepta bien compartir su cotidianidad con ellos. Muy inteligente, viene cuando lo llaman (si así lo desea...) y entiende rápidamente una prohibición. Como es juguetón y rebosa de energía, se le puede enseñar a realizar diversos trucos.
La dieta del Gato Siamés
El gato Siamés debe beneficiarse de una alimentación adaptada a su modo de vida y a sus necesidades de carnívoro; las proteínas cárnicas son esenciales para su salud. Sus comidas, ya sean húmidas o en piensos, deben contener también fibras, materias grasas, oligoelementos (zinc, hierro, yodo...) así como vitaminas y minerales.
La ración diaria de un gato adulto esterilizado es de 27 a 70 g de piensos y de 30 a 80 g para un gato no esterilizado. Los fabricantes de latas o bolsas de comida húmeda han previsto la ración normal de una comida para un gato adulto.
Un gato sedentario de esta raza puede ganar peso fácilmente, por lo que su comida debe contener un porcentaje de carbohidratos inferior al 30 %; para un gato activo al exterior, este porcentaje puede situarse alrededor del 35%. El mercado ofrece una cantidad impresionante de marcas de piensos y de latas de comida húmeda para gatos. Estos productos deben ser elegidos de alta calidad para alimentar adecuadamente a un gatito o un gato adulto.
Un pequeño bol de piensos para gatos (idealmente sin cereales) puede dejarse a su disposición durante todo el día y la comida húmeda servirse una vez al día. Recomendada por varios veterinarios, la bi-nutrición puede comenzar desde los dos meses de edad. Esta puede continuar durante toda la vida del gato y resulta particularmente interesante en gatos mayores.
En el mercado se encuentran varias golosinas para gatos. Es necesario asegurarse de que no sean a base de cereales ni demasiado ricas en carbohidratos. Y no dárselas demasiado a menudo.
La salud del Gato Siamés
La duración de la gestación de esta raza es de aproximadamente 70 días. La esperanza de vida de un gato Siamés se sitúa entre 12 y 15 años (algunos gatos han llegado a la venerable edad de 20 años).
Puede ser susceptible a ciertos problemas de salud, generalmente de origen genético. Puede sufrir de amiloidosis, una enfermedad del hígado, asma o broncopatías congénitas. Malformaciones cardíacas a veces son diagnosticadas en algunos gatos, pero esto es más raro.
Desafortunadamente, estudios han demostrado que los Siameses son más a menudo afectados por cáncer que otras razas de gatos. El estrabismo es muy frecuente en esta raza felina pero, a menudo temporal, desaparece al cabo de cinco meses.
Los Siameses esterilizados son más propensos a padecer de insuficiencia renal o cálculos urinarios. Para prevenir estas patologías, el animal debe beber suficiente agua cada día; esta debe mantenerse disponible y limpia constantemente.
El pelaje sedoso del Siamés se mantiene fácilmente con un simple peinado cada dos o tres semanas (más seguido en el período de muda). Los peines de acero son apropiados para distribuir el aceite natural en su pelaje y eliminar los pelos muertos.
Si el gato es sedentario, se deben cortar sus garras de vez en cuando con un cortaúñas para gatos. Para evitar la formación de sarro, se recomienda cepillar sus dientes con una pasta de dientes para gatos. Una visita puntual al veterinario permite administrarle vacunas según sea necesaria, verificar su salud bucal y su peso. El Siamés es un animal muy limpio; si su arenero no se limpia a diario, no estará inclinado a usarlo.
El hábitat del Gato Siamés
El Siamés es un compañero de vida muy adaptable que puede vivir tanto en un apartamento como en una casa de ciudad o en el campo. Aceptarà quedarse dentro si recibe suficiente atención y si tiene juguetes (un árbol para gatos por ejemplo) para entretenerse.
Si tiene acceso a un recinto exterior, hay que asegurarse de que no pueda deslizarse a través de la valla ni saltar por encima. Algunos Siameses disfrutan de pasearse con correa. Incluso si el gato Siamés se encariña más con una persona en particular, generalmente se lleva bien con todos. Si los niños no intentan molestarlo o ser bruscos con él, se convertirá en un buen compañero de juegos para ellos.
Este gato sorprendente es perfectamente adecuado para personas dinámicas, que están dispuestas a darle toda la atención que tanto aprecia. Puede ser un animal de compañía agradable para una persona mayor, siempre y cuando esta pueda satisfacer sus necesidades de afecto y juego.
La reproducción del Gato Siamés
El periodo de celo de las hembras ocurre en primavera y otoño; cada periodo dura de 20 a 30 días. Un criador profesional, especializado en la cría de esta raza felina, es la persona a consultar cuando se desea aparear una hembra siamesa.
Es importante saber que estos gatos pueden reproducirse a partir de los 8 meses de edad. En promedio, una camada cuenta con tres a cinco gatitos y una hembra puede tener dos camadas por año. Amamanta a sus pequeños durante aproximadamente seis semanas.
Como puede verse, el gato Siamés posee un encanto único. Estético, cariñoso, inteligente, afectuoso y enérgico, no deja a nadie indiferente.
