Bigote del perro o vibrisas: ¡7 cosas que debes saber absolutamente!
Vuestro perro está cubierto de pelos, eso ya lo sabéis. Pero, ¿habéis notado que algunos de esos pelos, especialmente en su hocico, son más largos y gruesos que los demás? Estos pelos, a menudo llamados bigote del perro, también se conocen como vibrisas. Si observáis bien a vuestro compañero, descubriréis que estos bigotes están implantados en el hocico, pero también en los labios, la barbilla y las mejillas. Incluso hay algunos por encima de sus ojos. ¿En qué se diferencian estos pelos de los otros pelos?
El pelaje del perro sirve principalmente para mantenerlo caliente. Mientras que el bigote del perro es un órgano sensorial primordial. Le sirven para detectar las vibraciones a su alrededor y las diferencias de presión. Al igual que los conejos, ratones o gatos, él siente físicamente su entorno. Detecta los movimientos y evalúa las formas y las distancias entre un objeto y su hocico. Estos pelos, además de ser parte del sentido del tacto, también son una protección natural para los ojos de vuestro perro. Descubramos en detalle las diferentes funciones de los bigotes del perro y veamos por qué no debemos cortarlos.
1. Sentido del tacto
Los perros de pelo corto están más expuestos a agresiones físicas que los perros de pelo largo. Si se chocan con un mueble, la sensación será más fuerte que si hubiera una gran espesor de pelos. Es por eso que el bigote del perro tiene un rol sensorial más importante para estos perros. Les permite tener una gran conciencia de su entorno para evitar empujar objetos en la casa.
Esta habilidad también es útil cuando el perro juega. Enfocado en su juguete, no necesariamente ve los obstáculos. Sus bigotes toman el relevo e indican sus ubicaciones. Este órgano sensorial extremadamente desarrollado está intrínsecamente vinculado al perro. Cuando pasea por la ciudad, guarda la casa o corre por el campo, sus bigotes están ahí para informarle sobre su entorno inmediato y los peligros potenciales.
2. Detección de movimientos en la atmósfera
El ojo humano está diseñado para detectar movimientos en un lugar donde todo es estático. En el perro, esta capacidad se atribuye a los bigotes. Si una mosca pasa cerca, el perro la siente gracias a los movimientos del aire captados por sus bigotes.
Su animal también detecta gestos a su alrededor, vibraciones o temblores, corrientes de aire, etc. Este órgano es muy sensible y sumamente eficaz. Permite al perro anticipar los movimientos circundantes. Puede entonces aceptar o evitar el contacto de una mano o lo que considere como un peligro demasiado cercano.
3. Propiocepción y orientación
La propiocepción, es el hecho de tener conciencia de la presencia de su cuerpo en su entorno. Gracias a sus bigotes, el perro sabe perfectamente dónde se encuentra todo su cuerpo. Esto le permite saber de antemano si tiene espacio para pasar por tal o cual lugar.
También sabe dónde está su dueño, las demás personas en la habitación, los animales circundantes y los obstáculos que debe cruzar o evitar. Sus bigotes le permiten guiarse y encontrar su camino en su espacio de vida, de día como de noche.
4. Evaluación de las formas y texturas de objetos
Los bigotes del perro poseen una habilidad considerable: la de poder evaluar la forma y la textura de los objetos. Esta capacidad es particularmente útil, especialmente en perros discapacitados.
De hecho, un perro con discapacidad visual o ciego utiliza mucho sus vibrisas para descubrir los elementos cercanos a él. Sus bigotes también le ayudan a navegar en su entorno sin chocarse con paredes y muebles.
5. Estimación de la distancia entre un objeto y su hocico
Los bigotes del perro son un muy buen indicador de distancia. Cuando el perro se alimenta o bebe agua, no solo utiliza su visión para saber dónde está su tazón. Sus bigotes están ahí para indicarle si el objeto se acerca o si se aleja.
El perro utiliza esta habilidad para olfatear un animal, para sentir a su dueño acercarse o cuando busca su pelota debajo de un mueble. Los buenos reflejos del perro están estrechamente relacionados con sus bigotes, especialmente durante los juegos.
6. Protección natural de los ojos
Como cejas, los pelos situados encima de los ojos del perro sirven para evitar la introducción de suciedad. Las pequeñas partículas de polvo son detenidas por este barrera, evitando así muchos problemas oftálmicos.
Estas vibrisas también funcionan como un radar. Detectan los movimientos del aire e indican al perro cuándo parpadear o cerrar los ojos para protegerse. Donde los humanos utilizan la visión para cerrar los párpados ante la aproximación de un peligro, el perro se sirve de sus vibrisas para sentir físicamente el riesgo.
7. Prohibición de cortar los bigotes de un perro
Durante la preparación de ciertas razas de perros, a veces se cortan los bigotes. La razón es puramente estética. Es cierto que dejar grandes bigotes negros en un pequeño perro blanco bien afeitado no es de lo más atractivo.
Pero como habrán comprendido, estos bigotes representan un órgano indispensable para el perro. Cortar los bigotes de su perro equivale a quitarle la vista o el oído. Estos sentidos son esenciales para moverse, ya sea en la naturaleza o en casa.
Si cortas inadvertidamente el bigote del perro, no hay motivo para pánico. Durante algún tiempo, tu perro podría chocar con algunas divisiones y puertas. Sus habilidades de anticipación durante los juegos de pelota o durante sus partidas de caza al aire libre estarán ligeramente disminuidas. Pero sus bigotes volverán a crecer. Tu animal recuperará entonces la totalidad de sus capacidades sensoriales.
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