Perro St Hubert: un Olfato de experto al servicio de la Gendarmería

Con su aspecto masivo y su aire pacífico, el perro St Hubert es un perro de rastreo con un olfato formidable. Esta raza belga es hoy en día solicitada para encontrar a personas desaparecidas o detectar ciertas sustancias ilícitas. Los recientes eventos como la desaparición del pequeño Émile la han vuelto a colocar en el centro de atención.

Este perro de gran tamaño, robusto, masivo con una musculatura altamente desarrollada, tiene unos orígenes muy antiguos. Demuestra un carácter dulce y cariñoso, placentero y sociable. Pero esta amabilidad notoria no es su único atributo. De hecho, la raza se distingue por su olfato infalible y su resistencia.

Su olfato excepcional ya era conocido en el siglo VII por los monjes de la abadía de Saint Hubert en las Ardenas que lo utilizaban para encontrar peregrinos perdidos en el bosque. Este fino sabueso fue después utilizado en el siglo XIX en los Estados Unidos para encontrar a esclavos fugitivos antes de ayudar mucho más tarde en sus búsquedas a las fuerzas del orden, especialmente en los países anglosajones.

Reconocido definitivamente por la Federación Cinológica Internacional (FCI) en agosto de 1960, la raza Saint Hubert, debido a su olfato especialmente desarrollado y su resistencia, agrupa a perros de trabajo muy activos. Verdadero perro de rastreo de raza, el Saint Hubert se ha sumado de manera natural a sus "colegas" Malinois en las unidades de la gendarmería desde 2003. Cada año, una nueva promoción de Saint Hubert se integra en los grupos de investigación del Centro Nacional de Instrucción Cinológica de la Gendarmería Nacional (CNICG). Desde febrero de 2023 es el caso de Snoopy, Spartan, Sully 2, Seiko y Spartan, que, tras su formación reglamentaria de 17 semanas son declarados aptos para el servicio.

Debido a sus capacidades olfativas, el Saint Hubert es por lo tanto un perro especialmente buscado y solicitado para encontrar a personas desaparecidas en el marco de la Política de Refuerzos en mando destacado (RED). Once equipos formados por dúos perro/guía-repartidos por toda Francia realizan cada año más de 1 000 intervenciones.

Apenas nacidos, los cachorros Saint-Hubert son tomados a cargo por el CNICG que registra un efectivo permanente de alrededor de 480 maestros y 550 perros. Estos binomios se reparten en diversas especialidades que van desde la búsqueda de estupefacientes, de pólvoras de artefactos, de personas sepultadas bajo avalanchas, perdidas en el bosque, en el campo, al borde del mar…

Estos perros rastreadores dotados de al menos 230 millones de células olfativas son capaces de detectar el olor de la más mínima molécula humana y de retenerlo en la memoria aproximadamente 48 horas. Su educación y adiestramiento se basa en la educación positiva que asocia la recompensa.

La formación de estos perros está fundamentada en el amor por los humanos. Esto explica su profundo apego a su maestro y, en general, su devoción hacia el Hombre. Este amor hacia la raza humana puede hacer recorrer al perro St Hubert muchos kilómetros.

La formación, como se dijo anteriormente dura aproximadamente 6 meses y se realiza en Gramat en el Lot. Al término de este enseñamiento, los perros son declarados operativos y listos para asumir su primera misión. Mantienen cada uno el mismo maestro hasta su muerte. El centro de Gramat formó sus primeros Saint Hubert en 2009.

Cabe señalar que el Saint Hubert, que es más utilizado para buscar a personas desaparecidas, no tiene las mismas funciones que un Malinois o un pastor alemán, perros menos conciliadores y más versátiles que son capaces de morder o capturar a un ladrón.

El perro St Hubert, especializado en la búsqueda de personas fugadas de la cárcel, desaparecidas o extraviadas a causa de la enfermedad de Alzheimer, o incluso de delincuentes, está en el centro de la actualidad desde estos últimos días.

Los recientes acontecimientos angustiosos sobre la desaparición del pequeño Émile han permitido resaltar el talento de los perros Saint-Hubert que partieron en la búsqueda de este pequeño niño rubio de 2 años y medio, cuyo retrato se muestra repetidamente en todos los canales de noticias. Desaparecido en Vernet en los Alpes de Alta Provenza el sábado 8 de julio, el pequeño niño es objeto de intensas búsquedas apoyadas por la ayuda de varios equipos de caninos.

En los últimos años, muchas búsquedas tuvieron éxito gracias al talento de sabueso de los Saint Hubert. Por ejemplo, podemos mencionar a "Jupiter" que formaba un dúo con el comandante Bruno Mourier de la brigada canina de Gard. Realizó el primer rescate que permitió encontrar en 2009 a un sexagenario desaparecido 24 horas antes de un Ehpad en los Alpes Marítimos.

También reconoceremos el talento y valor de "Happle", la perra Saint-Hubert del suboficial Robin David. Hoy en día retirada, tiene a su haber no menos de 100 rescates incluido el de una persona anciana en hipotermia que se había perdido en el bosque buscando espárragos silvestres.

¿Y qué decir del final feliz tras la desaparición de gemelos de 3 años en Levie en Córcega del Sur en julio de 2013? Hugo, perro Saint Hubert enviado desde el continente, pudo, gracias a su olfato excepcional, encontrar a los 2 niños perdidos en el maquis corso.

La desaparición de Émile ha emocionado y mantiene en vilo a toda Francia. Si el niño se encuentra bien en algún lugar, no hay duda de que el perro St Hubert logrará detectarlo. Encontrar a este niño sería la recompensa más hermosa para estos animales salvadores excepcionales y, sobre todo, un alivio para todo el país.