Tener un perro aumentaría la esperanza de vida
Varios estudios han demostrado que tener un perro realmente aumenta la esperanza de vida. ¿Pero cuál es el argumento de estos investigadores? ¿En qué se basan?
Tener un perro ayuda a mantenerse en forma
La energía de un perro, a diferencia de la legendaria flojera de los gatos, empuja a su dueño a activarse para cuidarlo.
Hay que sacar todos los días a su compañero canino, para permitirle airearse y estirar las patas. Pero esto es tan beneficioso para el perro como para el dueño. Este último se ve obligado a caminar a su lado, lo cual hace trabajar diariamente su corazón y sus músculos. Estos se refuerzan con el ejercicio y el riesgo de sufrir desmayos cardíacos disminuye.
Un buen respiro de aire puro todos los días también es excelente para la salud.
Los investigadores han constatado que los seniors dueños de un perro gozan de una condición física más joven de diez años.
Efectos beneficiosos sobre el estado de ánimo también
El perro es también un excelente remedio contra la depresión.
No solo la actividad y las salidas diarias mejoran el ánimo y alivian el aburrimiento, sino que además el afecto de un perro es ilimitado. Es un compañero ideal para las personas que se sienten solas. Su energía y alegría de vivir ponen vida en la casa.
Si no se siente capaz de recibir un perro, ya sea para atender a sus necesidades permanentemente o para pagar los gastos veterinarios, algunas organizaciones ponen a disposición de los seniors alquileres de perros.
Si usted es el feliz dueño de un perro y tiene más de 65 años, ¡espere entonces rejuvenecer más y más! Continúe paseando a su animal y conserve con él verdaderos lazos de afecto.