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Glaucoma en gatos: causas, síntomas y tratamiento

El glaucoma en gatos es una patología ocular que afecta generalmente a los felinos. Ojos más grandes, de color rojo con lágrimas regulares, estos son los signos de esta enfermedad ocular degenerativa que puede llevar a la pérdida progresiva de la visión. Más específicamente, el ojo del gato produce en exceso secreciones acuosas que ocasionan un aumento de la presión intraocular dañando el nervio óptico así como la retina.
Por lo tanto, ante la menor duda sobre el comportamiento del animal, sus ojos deben ser consultados de inmediato por un veterinario para que pueda examinar los signos reveladores. Generalmente, el glaucoma felino afecta a los gatos de edad avanzada, aunque puede aparecer desde el nacimiento del felino. En este artículo, vamos a revisar las causas, los síntomas y el tratamiento de esta enfermedad ocular.

Glaucoma en gatos: causas, síntomas y tratamiento

Las causas del glaucoma en gatos

El glaucoma en gatos es una enfermedad ocular grave que puede conducir a la ceguera o la pérdida total de la visión. Esta patología tiene diferentes orígenes.

El glaucoma congénito

Puede ser el resultado de una modificación genética durante la gestación. Por eso, la enfermedad está presente desde los primeros meses del felino. El síntoma es muy simple: el ojo del animal presenta una pequeña malformación. Sin embargo, este tipo de glaucoma es muy raro en los gatos.

El glaucoma primario

Cuando esta enfermedad ocular es transmitida por los padres del animal, hablamos de una enfermedad hereditaria llamada glaucoma primario. Generalmente aparece algunos años después del nacimiento, es decir, a los 4 o 5 años, afecta primero a un solo ojo del animal y luego al otro ojo unos meses más tarde. Aunque es bastante raro en los gatos, existen ciertas razas que están particularmente afectadas por esta patología, incluyendo los Birmans, los persas o incluso los siameses.

El glaucoma secundario

Hablamos de glaucoma secundario cuando esta patología ocular se ha desarrollado a consecuencia de otra enfermedad ocular. Por ello, se considera como la forma de glaucoma más común en gatos. Las enfermedades oculares más frecuentes que originan esta forma de enfermedad son:

  • La uveítis anterior: se trata de una irritación en el interior del globo ocular;
  • La catarata: el lente del ojo llamado cristalino se inflama y se vuelve oscuro;
  • La luxación del cristalino: el cristalino se mueve dentro del globo ocular;
  • El hifema: el ojo del gato empieza a sangrar.

Los síntomas del glaucoma y diagnóstico

En presencia de esta enfermedad, el sistema ocular del gato pierde su funcionamiento normal. El animal puede así presentar numerosos signos que son a menudo alarmantes para consultar lo antes posible a un veterinario.

  • Un aumento precipitado del tamaño del globo ocular;
  • Rojeces en el ojo;
  • Una dilatación y asimetría de las pupilas;
  • Párpados cerrados;
  • Lagrimeo frecuente;
  • Degeneración del nervio óptico;
  • Una pérdida progresiva de la vista que se percibe gracias a un andar desordenado.

Para diagnosticar el glaucoma en los gatos, el veterinario es el único profesional de la salud que puede realizarlo. Para ello, efectuará una medición de la presión intraocular (PIO) mediante un aparato especial llamado tonómetro. Completamente indoloro, esta medición requiere una inmovilidad total para obtener un valor seguro. Por eso, la sesión puede ser estresante para el gato. Este diagnóstico permite evaluar la gravedad de la patología para limitar los posibles daños visuales.

El tratamiento del glaucoma

El objetivo de un tratamiento del glaucoma es hacer desaparecer los dolores al mismo tiempo que estabilizar la presión intraocular para evitar la ceguera. Para ello, el veterinario establece un protocolo de cuidados para tratarlo de forma eficaz. Para bajar la presión, la administración de colirios y de corticoides en forma de inyección es el tratamiento más utilizado. A menudo, este tipo de tratamiento con colirio especial no resulta efectivo incluso después de varios meses de administración. Cuando el resultado es insatisfactorio, una intervención quirúrgica es entonces necesaria para reducir la presión dentro del ojo. Se trata de la enucleación que consiste en retirar el ojo enfermo y en la implantación de una prótesis.

Además, el glaucoma puede tratarse de otra manera: el recurso al láser. Si su aparición es reciente, la intervención quirúrgica con láser sigue siendo una buena opción para disminuir de manera considerable el humor acuoso y por tanto bajar la presión. Es una intervención bastante costosa que requiere un buen seguro para poder beneficiarse de ella.

Prevención del glaucoma

Para que un animal doméstico como el gato no contraiga esta grave enfermedad de los ojos, es importante ofrecerle un entorno sano y cuidados adecuados. Comenzando por una alimentación equilibrada que le permita mantenerse fuerte física y mentalmente. Además, para evitar la aparición del glaucoma, es necesario evitar a toda costa dejar vagar a su gato por cualquier lugar. Después de un paseo, se aconseja realizar una verificación minuciosa de sus ojos. En caso de cualquier afección ocular, el cuidado debe realizarse de inmediato para prevenir el desarrollo de ciertas patologías. Ante cualquier cambio de comportamiento o transformación en la forma de moverse del animal, su dueño debe mostrar una vigilancia aumentada frente a su animal. Esto puede ser el inicio de la enfermedad de los ojos. Por ello, debe supervisar de manera regular los ojos y la visión del gato. También es importante no olvidar la visita de control periódica con el veterinario.


Si la prevención del glaucoma en gatos resulta difícil, es posible anticipar ante cualquier problema de salud. De hecho, la suscripción a un seguro de salud para mascotas puede ser una solución indiscutible para no gastar demasiado dinero en los cuidados del animal. Con un seguimiento veterinario regular y un buen conocimiento de las patologías felinas, su gato tiene muchas probabilidades de preservar su salud, y usted de prevenir los riesgos y enfermedades susceptibles de afectarlo. Por lo tanto, manténgase conectado a nuestro blog que trata sobre la salud animal para informarse en tiempo y forma sobre las diversas afecciones y cuidados apropiados.

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