Fuegos artificiales del 14 de julio ¿con o sin mi perro?
Con la llegada de la fiesta nacional del 14 de julio, y las explosiones vivas en colores de los fuegos artificiales, lo que puede parecer un momento mágico para nosotros, resulta ser un verdadero estruendo ensordecedor y estresante para nuestros perros, ¡que pueden caer en pánico!
Porque la redacción de Zoomalia se preocupa por el bienestar de sus animales, aquí hay alguna información para comprender el miedo fóbico a los fuegos artificiales en perros, así como alternativas educativas para disfrutar plenamente del espectáculo!
Índice:
- "¿Por qué mi perro tiene un miedo pánico a los fuegos artificiales?"
- "¿Cómo acostumbrar a mi perro al ruido antes de los fuegos artificiales?"
- "¿Debo llevar a mi perro a disfrutar de los fuegos artificiales con nosotros?"
"¿Por qué mi perro tiene un miedo pánico a los fuegos artificiales?"
El miedo a los fuegos artificiales es una de las fobias más comúnmente encontradas en perros!
Para nuestros animales de compañía, estos destellos de luz riman con estruendo sonoro, olor a pólvora, humo compacto... tantas perturbaciones inusuales que pueden trastornar los sentidos de nuestros compañeros de cuatro patas.
Los perros tienen receptores sensoriales mucho más sensibles que nosotros los humanos. Su oído es muy desarrollado (5 a 7 veces superior al del hombre) y ante cualquier detonación sospechosa, los más sensibles al ruido pueden quedar aterrorizados.
Así, muchos perros huyen y se pierden durante los fuegos del 14 de julio. Pueden recorrer varias decenas de kilómetros para poner una distancia suficiente entre ellos y la fuente del ruido para sentirse finalmente seguros.
El instinto y sus sentidos asimilan entonces el fuego artificial como un peligro inminente!
"¿Cómo acostumbrar a mi perro al ruido antes de los fuegos artificiales?"
Antes de disfrutar la totalidad del espectáculo, es imprescindible acostumbrar y confrontar a los perros sensibles al ruido!
¿Sabías que? los perros viven en el momento presente, y no a través de sus recuerdos fóbicos. Incluso si el animal comienza a envejecer, siempre podrá cambiar su miedo al ruido con tu mayor apoyo.
Intenta ignorar las reacciones de preocupación de tu compañero (jadeos, temblores, gemidos) para reducir su ansiedad. No sirve de nada castigarlo o, por el contrario, reconfortarlo con caricias y abrazos tranquilizadores. Tu perro entonces se imaginará que "¡es bueno tener miedo, ya que soy recompensado!"
Un remedio efectivo es la desensibilización progresiva. Basta con encender la radio, la televisión o directamente difundir grabaciones de sonidos de fuegos artificiales con un volumen bajo. Aumentar gradualmente el sonido mientras adoptas tú mismo un comportamiento más que habitual.
Paralelamente, haz una distracción con sus juguetes favoritos o incluso sus golosinas.
Si tu perro ya no presta ninguna atención al ruido... ¡HAS GANADO! Ahora puedes gratificarlo como se debe por su valentía.
"¿Debo llevar a mi perro a disfrutar de los fuegos artificiales con nosotros?"
Si tu perro todavía es demasiado sensible al ruido y propenso al pánico, es preferible dejarlo en casa para no asustarlo más y evitar que se escape.
Cierra las cortinas, enciende la televisión para ocultar el ruido y prepara su escondite seguro antes de partir.
Para los perros un poco más valientes, la experiencia de fuegos artificiales "en vivo" puede ser intentada!
Prolonga el paseo de antes del espectáculo, para que se olvide del estruendo sonoro, demasiado ocupado en descansar.
Adopta un tratamiento antiestrés para perro como collares, camisetas, difusores de ambiente... para calmar su ansiedad. Tu perrito estará así completamente relajado y no prestará ninguna atención a la atmósfera ruidosa de los fuegos artificiales.
Ahora, ¡estás listo... así que disfruta plenamente del gran final con tus compañeros favoritos!
Elsa Blacha.
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