Collar para perro: ¿nylon o cuero?
Para que la experiencia del perro sea satisfactoria, es importante saber elegir bien su collar. No todo es adecuado desde el momento en que no todos los perros tienen el mismo tamaño o fuerza, y no realizan las mismas actividades o no tienen la misma longitud de pelo. Todas estas condiciones afectarán la selección.
Tiene muchas opciones, como el nylon o el cuero; pero antes de decidirse por uno u otro, deberá conocer sus principales características respectivas.
El collar para perro en nylon
Los collares de nylon para perros son generalmente collares planos hechos de tejido de mallas de nylon. Vienen equipados con una hebilla de metal o un cierre de plástico duro y están disponibles en una amplia gama de colores y patrones. Los collares de nylon se fabrican en una gran variedad de tamaños y generalmente son ajustables, por lo que es fácil encontrar uno para cualquier perro.
Ventajas e inconvenientes del collar en nylon
Los collares de nylon generalmente son asequibles y están ampliamente disponibles. Son ligeros y cómodos para los perros que los llevan a diario. Tienden a ser bastante resistentes para no necesitar ser reemplazados con demasiada frecuencia y son lo suficientemente económicos como para ser reemplazados fácilmente. Sin embargo, si su perro tiende a tirar de la correa, un collar de nylon se ensanchará con el tiempo. Es posible que los cierres de plástico se rompan debido a un tirón excesivo.
El collar para perro en cuero
Los collares de cuero están disponibles en versiones planas o enrolladas, generalmente con una hebilla de metal. Tienden a ser costosos, especialmente si están hechos de cuero de alta calidad. La gama de opciones de colores es limitada, ya que generalmente están disponibles en negro o en tonos de marrón variados. Son ajustables de la misma manera que un cinturón de cuero, con agujeros perforados en un extremo que le permiten ajustar la longitud.
Ventajas e inconvenientes del collar en cuero
Como cualquier otro producto de cuero, obtienes lo que pagas. El cuero barato puede agrietarse y romperse. Además, al igual que los de nylon, estos collares pueden estirarse con el tiempo, especialmente si se mojan. Finalmente, este material particularmente rígido podría frotar el cuello de su perro y provocar irritaciones si tiene la piel sensible.
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