Antiparasitarios naturales VS antiparasitarios clásicos
Si el uso de productos naturales es hoy en día cada vez más aclamado para los humanos, lo mismo ocurre con los animales de compañía. Se ve especialmente la aparición de alimentos bio, naturales, o también, la emergencia de productos de cuidado y antiparasitarios a base de activos naturales. Pero, ¿cómo se utilizan y qué eficacia tienen estos últimos? ¿Qué los distingue de los tratamientos antiparasitarios clásicos?
Índice:
- Diferencias entre antiparasitarios naturales y clásicos: ¿cuáles son?
- ¿Por qué usar antiparasitarios naturales?
Diferencias entre antiparasitarios naturales y antiparasitarios clásicos: ¿cuáles son?
Al igual que los tratamientos antiparasitarios clásicos, los productos naturales están disponibles en las mismas formas: collar, pipeta, spray, comprimido o incluso polvo.
Las moléculas de los productos antiparasitarios tradicionales, como el imidacloprid, el fipronil o la permetrina, son consideradas insecticidas y tienen el efecto de matar rápidamente a los parásitos adultos ya presentes en el animal. Dependiendo de la composición del producto, este también puede tratar el entorno directo del perro y gato actuando sobre todos los estadios del desarrollo de los parásitos: larvas, huevos o pupas.
Por su parte, las moléculas naturales como el Lavandin, el Geraniol o el Margosa tienen un efecto insectífugo, es decir, repelente ante los parásitos. Por lo tanto, a menudo se utilizan como prevención, pero no como tratamiento para los animales ya infectados.
¿Por qué usar antiparasitarios naturales?
El uso de antiparasitarios naturales es especialmente recomendado para los siguientes casos:
- Como prevención antes del comienzo de la temporada de parásitos: En primavera, vuelven los días bonitos y ¡los parásitos externos también! Tratar a tu animal con un producto natural de efecto repelente en este momento puede ser interesante para evitar una infestación masiva durante la temporada alta de parásitos.
- Como alternativa a las moléculas químicas: si te preocupa tratar a tu animal con este tipo de componentes, puedes recurrir a soluciones naturales. Pero, atención, su eficacia es diferente y su uso poco adecuado en caso de fuerte infestación.
- Para tratar a los animales sensibles: algunos perros o gatos pueden tener reacciones indeseables a las moléculas químicas que componen los productos antiparasitarios clásicos. Recurrir a moléculas naturales puede ser entonces una solución interesante en estos casos.
- Para asegurar la protección de un gato de interior: el riesgo de contaminación por parásitos externos es limitado si un animal no tiene acceso al exterior. Recurrir a una protección basada en activos naturales puede entonces ser suficiente, salvo en caso de una temporada particularmente agresiva.
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